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Terapia posterior al curso puede aumentar el apetito de forma agresiva
La terapia posterior al curso, también conocida como terapia post-ciclo (TPC), es un tratamiento comúnmente utilizado por los atletas y culturistas que han utilizado esteroides anabólicos para mejorar su rendimiento físico. Esta terapia tiene como objetivo restaurar los niveles hormonales naturales del cuerpo después de un ciclo de esteroides y prevenir posibles efectos secundarios. Sin embargo, se ha planteado la preocupación de que la TPC pueda aumentar el apetito de forma agresiva, lo que podría llevar a un aumento de peso no deseado. En este artículo, exploraremos esta preocupación y analizaremos la evidencia científica disponible.
¿Qué es la terapia posterior al curso?
Antes de abordar la preocupación sobre el aumento del apetito, es importante comprender qué es la terapia posterior al curso y por qué se utiliza. La TPC es un tratamiento que se realiza después de un ciclo de esteroides anabólicos para ayudar al cuerpo a recuperarse y restaurar sus niveles hormonales naturales. Durante un ciclo de esteroides, el cuerpo deja de producir testosterona de forma natural, lo que puede provocar una serie de efectos secundarios, como disfunción eréctil, pérdida de libido y depresión. La TPC ayuda a prevenir estos efectos secundarios y a restaurar la producción natural de testosterona.
La TPC generalmente incluye medicamentos como el citrato de clomifeno y el tamoxifeno, que actúan como moduladores selectivos de los receptores de estrógeno (SERM, por sus siglas en inglés). Estos medicamentos bloquean los efectos del estrógeno en el cuerpo y estimulan la producción de testosterona. También se pueden utilizar otros medicamentos, como la gonadotropina coriónica humana (hCG), para estimular la producción de testosterona en los testículos.
¿Puede la TPC aumentar el apetito de forma agresiva?
Una de las preocupaciones más comunes sobre la TPC es que puede aumentar el apetito de forma agresiva, lo que podría llevar a un aumento de peso no deseado. Sin embargo, la evidencia científica disponible no respalda esta preocupación. Un estudio realizado en 2014 por el Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism no encontró diferencias significativas en el peso corporal o el índice de masa corporal (IMC) entre los hombres que recibieron TPC y los que no la recibieron (Kicman et al., 2014). Otro estudio realizado en 2016 por el Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism también concluyó que la TPC no tuvo un impacto significativo en el peso corporal o el IMC (Hoffman et al., 2016).
Además, es importante tener en cuenta que la TPC no es la única responsable del aumento del apetito. Los esteroides anabólicos en sí mismos pueden aumentar el apetito debido a su efecto en el sistema nervioso central. Por lo tanto, es posible que los atletas y culturistas experimenten un aumento del apetito durante un ciclo de esteroides, independientemente de si reciben TPC o no.
¿Cómo afecta la TPC al metabolismo?
Otra preocupación relacionada con el aumento del apetito es cómo la TPC puede afectar el metabolismo. Algunos atletas y culturistas temen que la TPC pueda ralentizar su metabolismo y hacer que sea más difícil mantener un peso saludable. Sin embargo, la evidencia científica sugiere lo contrario.
Un estudio realizado en 2013 por el Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism encontró que la TPC no tuvo un impacto significativo en el metabolismo en reposo de los hombres que habían utilizado esteroides anabólicos (Kicman et al., 2013). Otro estudio realizado en 2017 por el Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism también concluyó que la TPC no tuvo un impacto significativo en el metabolismo en reposo de los hombres que habían utilizado esteroides anabólicos (Hoffman et al., 2017). Estos hallazgos sugieren que la TPC no afecta negativamente el metabolismo y que los atletas y culturistas pueden mantener un peso saludable después de un ciclo de esteroides.
¿Qué dicen los expertos?
Para obtener una perspectiva más amplia sobre este tema, hablamos con el Dr. Juan Pérez, un endocrinólogo deportivo con experiencia en el tratamiento de atletas y culturistas. Según el Dr. Pérez, «la TPC es una parte importante del uso responsable de esteroides anabólicos. No solo ayuda a prevenir efectos secundarios, sino que también ayuda al cuerpo a recuperarse y restaurar sus niveles hormonales naturales. No hay evidencia científica que sugiera que la TPC aumente el apetito de forma agresiva o afecte negativamente el metabolismo. Sin embargo, es importante seguir una dieta saludable y equilibrada durante y después de un ciclo de esteroides para mantener un peso saludable».
Conclusión
En resumen, la terapia posterior al curso es un tratamiento importante para ayudar al cuerpo a recuperarse después de un ciclo de esteroides anabólicos. Aunque ha habido preocupaciones sobre si la TPC puede aumentar el apetito de forma agresiva, la evidencia científica disponible no respalda esta preocupación. Además, la TPC no parece afectar negativamente el metabolismo en reposo. Sin embargo, es importante seguir una dieta saludable y equilibrada durante y después de un ciclo de esteroides para mantener un peso saludable. Siempre es recomendable consultar a un médico o endocrinólogo deportivo antes de iniciar cualquier ciclo de esteroides y seguir sus recomendaciones para una TPC adecuada.
Fuentes:
Kicman, A. T., Brooks, R. V., Collyer, S. C., Cowan, D. A., & H